martes, 3 de junio de 2014

A la calle

Este relato surgió como una improvisación, en vivo,  en mi programa de radio: “El cazador de historias” con una lista de palabras que me envió una oyente y que eran las siguientes:

   “Perder, ganar, jugar, sonreír, llorar, sentir, ver, luchar, animarse, paz”
   
                                                 
El pobre perro tenía todas las de perder. El viento soplaba  y la bolsita de nylon cada vez  volaba más alto. No importaba  cuanto saltara y menos aún todo lo que ladrara, no lograría ganar a la picara brisa que se llevaba el objeto de su cacería en un viaje que parecía no tener fin, una bolsa de plástico de un mercado. No podía dejar de mirarlo. Se agachaba, movía la cola, altas las orejas, la lengua afuera y ladrido y ladrido y ladrido… Sólo se trata de jugar y divertirse. Por un momento, me pareció, que lo vi sonreír ! Si se lo digo a alguien me van a tratar de loco, o estúpido; todos saben que los animales no tienen este tipo de gestos ni ningún otro como llorar. Pero era su actitud lo que reflejaba ese gesto.  Una mañana soleada, una correa que se corto, un alambrado roto y… a la calle. ¿Que podía sentir sino felicidad ? Hay que ver a un perrito luchar contra el viento por una bolsa y habría que animarse a imitarlo. Esta libre, feliz, despreocupado y en paz. ¿Y la bolsita?, es lo que menos importa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario